Fue repudiable el accionar de algunos miembros de la conducción del SUTEBA Quilmes, el pasado miércoles, cuando los estudiantes de varias escuelas se movilizaron por justos reclamos al Consejo Escolar. Pretendiéndose montar en la acción de los pibes, Adrián Weissberg, secretario adjunto de la seccional, los incitó reiteradamente a irrumpir en forma intempestiva en la sesión del Consejo, que se desarrollaba en ese momento. Silvia Mathauss, también del SUTEBA Quilmes, lejos de contener, justificó a los pibes de los que es docente, cuando los trabajadores del Consejo le advirtieron sobre el riesgo que se desprendiera una mampara, sobre la que estaban golpeando. Además los arengaba al grito de "hay que desenmascarar al poder político de Quilmes".
Tuvieron que ser los propios pibes los que pidieran que no se sigan tirando petardos en el interior, ya que su uso estaba poniendo en riesgo un lugar donde hay material combustible y que, en ese momento, estaba ocupado por un nutrido número de estudiantes.
Lo más indignante fue la intervención de Débora Procaccini "secretaria de derechos humanos" de la seccional que incitó a los pibes contra el automóvil del Presidente del Consejo, vehículo que terminó rayado y sumamente deteriorado.
Fuimos testigos porque estuvimos acompañando a los estudiantes porque nos invitaron, porque sabemos que necesitan solución a sus problemas, porque nos parece maravilloso que den sus primeros pasos en la lucha por sus derechos, porque nosotros también vivimos esa extraordinaria etapa de la vida. Estuvimos para orientarlos, para ayudarlos, para protegerlos, como nos corresponde como adultos. Por el contrario, que estos otros adultos manden a los pibes al frente con objetivos político partidarios y alentarlos a la violencia es repugnante.
No fue un hecho aislado, ese mismo día la Lista Multicolor del SUTEBA Mar del Plata desarrolló una acción similar, aprovechándose de los estudiantes para producir serios destrozos en el Consejo Escolar de ese distrito.
Evidentemente, piensan que así se muestran combativos, en su desesperación ante el creciente desprestigio que tienen entre los trabajadores docentes.
Paradógicamente, estos grupos se victimizan cuando se los muestra tal cual son. Seguramente lo harán frente a esta declaración “proyectando” su agresión, como si la ejercieran otros sobre ellos. Pero más que las palabras hablan los hechos violentos que protagonizan.
Damos a conocer estos hechos porque alentamos la movilización y la organización de los estudiantes y, consecuentemente, repudiamos toda manipulación de los que quieren sacar tajada de ella.
Walter Ormazábal, Fabiana Perez Valdez, Laura Leonardi, Pablo Insua,Viviana Buscaglia, Gustavo Lappano, Claudia Mansilla
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