viernes, 12 de diciembre de 2014

Renombraron las calles de la Ribera y recordaron a los desaparecidos de Quilmes/Comunicado CTA

 La calle 23 bis lleva a partir de ahora el nombre de Juan Carlos Fund, mientras que el pasaje 96 fue renombrado como Vicenta Orrego Meza y la calle 25 bis como Vicente Fiore. Carla Fund, hermana de uno de los desaparecidos durante la dictadura militar, manifestó emocionada su agradecimiento por el reconocimiento, aunque aseguró que cuando se acercó a la calle 23 bis no pudo estar un minuto frente al cartel que homenajea a su hermano.
Por decisión de la Secretaría de Derechos Humanos de Quilmes y la aprobación del Concejo Deliberante, la calle 23 bis lleva el nombre de Juan Carlos Fund, en homenaje al trabajador metalúrgico de la empresa Faraday, desaparecido durante la última dictadura militar.

En tanto que el pasaje conocido como calle 96 es ahora “Vicenta Orrego Meza”, en reconocimiento a la militante de la JP y Montoneros en Almirante Brown, fusilada por los grupos de tareas en marzo de 1977, mientras que la calle 25 bis fue renombrada como Vicente Fiore, el obrero metalmecánico y delegado de SMATA, secuestrado en septiembre de 1977.

Clara Fund, hermana de Juan Carlos, aseguró emocionada tener “sentimientos encontrados, por un lado agradecimiento por el reconocimiento, pero el día que se iba a hacer el acto oficial no pude estar un minuto frente a ese cartel; no podía mirar el nombre de mi hermano en una calle cuando tendría que estar acá”.

En ese sentido explicó que cada 10 de diciembre, día internacional de los Derechos Humanos, van a la Plaza de Mayo. “La elegimos como lugar de encuentro con mi hermano, espero algún día poder encontrarlo, para que se cierre este círculo y descanse en paz, aunque mi mamá lo sigue esperando”, agregó.
Consultada acerca de la última vez que vio a su hermano, Clara recordó que “él trabajaba en Faraday y estaba con parte de enfermo porque estaba con angina. El 25 de octubre de 1976 se hizo presente un grupo de personas en la empresa diciendo que eran de la Brigada de Quilmes y que venían a ver el legajo de Juan Carlo Fund. Cuando salí del trabajo y llegué a casa le dije a mi hermano que fueron a buscarlo, que pidieron su legajo. Le pregunté qué pasaba y me dijo que no sabía”.

“A las 12.20 de la noche nos rompieron la puerta y entró un grupo de personas, que eran los mismos que fueron a Faraday, dieron vuelta toda la casa, a mi mamá y a mí nos tiraron al piso y nos apuntaban con armas”, relató y siguió: “Uno dijo ‘dejalo porque este pibe está limpio’, pero otro dijo ‘vamos’ y lo llevaron. Nos dijeron que nos quedáramos en casa, que enseguida iba a volver. Nos quedamos esperando hasta que amanezca, después fuimos a la primera de Quilmes, a la Brigada, y ahí empezó este camino de encontrar gente que hacía el mismo reclamo que nosotros”.

“Llegamos al Ministerio de Interior y nos encontramos con gente que buscaba a sus hijos que estaban desaparecidos hace dos o tres meses. Recorrimos todos lados, Sierra Chica, La Plata, en algunos lados se burlaban y veníamos desechas”, lamentó, pero agregó: “Hoy seguimos, apostamos a la vida, jamás tuve necesidad de vengarme, no sentimos odio, no siento nada, que es lo peor que te puede pasar, pero extrañando siempre”.

“Mi hermano dejó de ser Juan Carlos Fund para transformarse en otro de los 30 mil”, cerró Clara, entre lágrimas.
Comunicado de la CTA de Quilmes
Ayer se cumplieron treinta y un años de la recuperación de la Democracia, después de la más oscura noche de la historia de nuestro país.
Fue un día particular. Conmemorado a pocas jornadas de la recuperación del nieto 116, hijo de Ana Rubel y Hugo Alberto Castro, a quien al conocerse la restitución de Ignacio Guido Montoya Carlotto (nieto de Stella), una persona cercana a la familia que lo crió se animó a confesarle que no era hijo de quienes decían ser sus padres.
En Quilmes se renombraron tres calles de la Ribera: Juan Carlos Fund, en homenaje al trabajador metalúrgico de la empresa Faraday, detenido desaparecido por la dictadura el 26 de octubre de 1976; Vicenta Orrego Meza, militante peronista, fusilada por los grupos de tareas en marzo del ’77; y Vicente Fiore obrero metalmecánico y delegado de SMATA, detenido en septiembre de 1977 y desaparecido desde entonces.
Por otra parte esta mañana amanecimos con la noticia que el represor y Ex-Mayor del Ejército Ernesto Barreiro, imputado en la megacausa La Perla por crímenes de lesa humanidad cometidos en ese centro clandestino de detención cordobés durante la última dictadura cívico–militar, reveló ante la justicia los lugares donde se habría realizado el enterramiento clandestino de al menos 25 víctimas del terrorismo de Estado.
Estos hechos a más de tres décadas del fin de la dictadura más sangrienta que debió padecer el Pueblo Argentino, revelan la importancia de la Lucha incansable de las Madres y las Abuelas de Plaza de Mayo y de todos quienes las acompañamos que llevaron a que hoy, la búsqueda de Verdad y Justicia sea una Política de Estado.
Ello no significa que esta realidad sea un logro definitivo y sin detractores, como lo revelan Mauricio Macri y sus acólitos que anuncian que con ellos "se acaba el curro de los Derechos Humanos", insultando la memoria de nuestros Treinta Mil Detenidos Desaparecidos y todos los Luchadores Populares que dejaron sus vidas en la pelea contra la impunidad. Macri lo dice groseramente, pero muchos terminarían con esta política si pudieran hacerse con el poder.
Desde la CTA de los Trabajadores de Quilmes reafirmamos nuestro compromiso para que no haya un sólo paso atrás en lo conquistado en materia de Derechos Humanos y en el conjunto de logros alcanzados en materia social, laboral y democrática.
“Los 30 mil viven en las luchas del pueblo”
Viviana Buscaglia                                                              Susi Paz
Secretaria de Derechos Humanos                         Secretaria General
Comisión Ejecutiva de la CTA de los Trabajadores de Quilmes



No hay comentarios: